Historia

Aínsa

Histórica puerta del Pirineo

Altitud:

569m

Población:

2.151

Historia

El pueblo antiguo de Aínsa, declarado conjunto histórico-artístico, además de uno de los pueblos más bonitos de España, es una antigua fortaleza medieval que fue el más importante puesto de mando en la reconquista cristiana a los árabes y que ha sabido conservar toda su esencia, a lo largo de los años.

Aínsa guarda vestigios celtas, romanos, musulmanes y cristianos, pero hay una leyenda que se alza sobre todas las demás; la de la cruz de fuego que apareció sobre una carrasca, a escasos tres kilómetros del pueblo y que, según se cuenta, dio a las tropas cristianas el valor necesario para recuperar la ciudad. Todavía hoy se sigue conmemorando la aparición y posterior batalla en la fiesta bianual de La Morisma.

Aínsa, hoy

El pueblo antiguo de Aínsa se extiende desde el castillo medieval, cuyos restos más antiguos datan del s.XI, hasta el pórtico inferior del pueblo, atravesando su famosa Plaza Mayor, sus preciosas calles flanqueadas por casas tradicionales, algunos restos de antiguos sistemas defensivos y la Iglesia de Santa María, con su torre defensiva, su bonito claustro y su misteriosa cripta.

Encantadores bares, restaurantes y tiendas de productos artesanos, hacen las delicias de miles de visitantes cada año, que llegan atraídos por la innegable belleza de un pueblo que, además, está enclavado en un lugar estratégico entre el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido y los parques naturales de La Sierra y los Cañones de Guara y Posets-Maladeta.

Su situación privilegiada en semejante entorno natural hace que desde Aínsa sea posible realizar todo tipo de actividades y deportes en la naturaleza.

Aínsa es también la sede de Zona Zero Pirineos, la asociación turística que, desde hace 11 años, apuesta por un desarrollo regenerativo del territorio a través de la recuperación de antiguos senderos tradicionales para la práctica del enduro-MTB y que es uno de los co-organizadores de Contrebandiers.

Aínsa Contrabandista

La Plaza Mayor de Aínsa dará el pistoletazo de salida a la segunda jornada de Contrebandiers 2022, el día 2 de octubre. Aunque será a una hora muy temprana, el espíritu contrabandista estará presente, también, en esta salida.

El escudo de Aragón

En el libro «Crónica de Aragón», de Fabricio Gualberto Vagad, que fue la primera historia escrita de Aragón, aparecen dos grabados del escudo de Aragón.

El primero, de 1496, solo está dividido en dos mitades; el segundo, de 1499 ya está dividido en los cuatro cuartos que hoy conocemos e incorpora la Cruz del Sobrarbe en el lugar más importante, el cuarto superior izquierdo.

¿Qué pasó en esos tres años para que la famosa Cruz del Sobrarbe, símbolo de la leyenda de la cruz de fuego que se se apareció sobre una carrasca cerca de Aínsa, pasara a formar parte del escudo?

La teoría cuenta que, tras refugiarse muchos cristianos en el Pirineo ante la invasión de los musulmanes, estos se organizaron en tres condados: Aragón, Ribagorza y Sobrarbe, que más tarde pasarían a formar parte del Reino de Aragón.

Estos cristianos eligieron un rey que los capitaneara, siempre que estuviera sometido a las leyes que hacían entre todos, en una época, la de los siglos XV y XVI, en la que el autoritarismo se extendía sin freno por toda Europa. Si el rey elegido no cumplía con sus leyes, sería reemplazado. ¡Así son los aragoneses!

Así, se deduce que la incorporación de la Cruz del Sobrarbe al escudo de Aragón fue un símbolo de respeto hacia las costumbres y tradiciones aragonesas, hacia el valor de su pueblo.

Una bonita historia que no mucha gente conoce y sobre la que os animamos a buscar más información.